Agentes de la Policía Nacional detuvieron, el pasado día 20 de noviembre, a un hombre de 46 años de edad, sin domicilio conocido, por presunta comisión de un delito de robo con violencia-intimidación.
El robo se produjo en la oficina de farmacia ubicada en la calle Ezequiel González número 21 de Segovia, cuando, sobre las 14 horas, una persona entró en el local y tras colocarse al otro lado del mostrador se acercó a la dependienta. Adoptando un gesto amenazante con su brazo, le dijo que le entregase todo el dinero. La empleada le hizo entrega de un billete de 20 euros que le acababa de dar un cliente, y que aún tenía en su mano; seguidamente esa persona emprendió la huida.
Los datos facilitados por quienes presenciaron los hechos permitieron que, minutos después, se localizase a un hombre que coincidía plenamente con la descripción del presunto autor. Tras la elaboración del correspondiente atestado, el detenido, a quien constan numerosos antecedentes policiales, fue puesto a disposición de la autoridad judicial.
Se da la circunstancia de que esta misma persona fue detenida el pasado día 19 de este mes, también por agentes de la Policía Nacional, como presunto autor de un delito de un robo con violencia-intimidación en la carretera de Madrona de la ciudad de Segovia.
25 noviembre, 2021
El día 19 de este mes le detienen delinquiendo.
El día 20 del mismo mes, es decir al día siguiente, ya está suelto y delinquiendo de nuevo. Le vuelven a detener.
Algo falla en la justicia de nuestro país.
25 noviembre, 2021
Algo falla: Las leyes y los que las hacen.
26 noviembre, 2021
y lo peor es que si tu te defiendes de una agresión de un personaje de estos a ti si te empluman pero bien. Bonito país se nos está quedando
26 noviembre, 2021
Nada nuevo… Llevamos sufriendo está “justicia” años y años y no lo remedian. Y para colmo la nueva Ley de Seguridad Ciudadana. Éstos privilegiados no saben ni donde tienen su mano derecha(o izquierda).
30 noviembre, 2021
Sorprende leer en este foro la ira con la que se juzga a un ladrón de medio pelo y la benevolencia empleada para juzgar a la cantidad de chorizos que roban en las instituciones dinero público por su mala gestión. CATaclismo.