Posted By Redacción on 4, Ago, 2021

Día de honores para el olímpico David Llorente, a su regreso a Segovia de la final de Slalom K1 en los Juegos de Tokyo. Recepción en Diputación y con el delegado de la Junta, ambos patrocinadores, por la mañana. Pero fue  por la tarde, en su pueblo Palazuelos de Eresma, y ante varios centenares de vecinos congregados donde se vivió el momento más emotivo. Frente al ayuntamiento, bajo un arco de palistas, compañeros y amigos del club  de Piragüismo de Palazuelos, la localidad recibía a su “héroe”, en palabras del conductor del acto, el periodista deportivo y vecino, Álvaro Gómez, para agradecerle es emoción vivida estos días disfrutando en primera línea de la sensación de disputar unos juegos.

Devolvió ese cariño Llorente relatando las experiencias vividas esos días, esa sensación agridulce de haber conseguido el enorme mérito de llegar a una final olímpica, de ser uno de los 10 mejores barcos del mundo, y a la vez la de aspirar a más. “Pero este deporte es así, es muy variable, el agua, el viento, de diez finales, estoy seguro que no se repetiría el podium en ninguna”, explicaba. De cara al futuro el plan es tan sencillo como ambicioso: volver. “Quiero preparar París y volver a disfrutar de este deporte, quiero volver a sentir esa adrenalina de una final olímpica”.