Antonio García Rivilla cierra 42 años de dedicación a la radio

Posted By Redacción on 19, Ago, 2014

El veterano comunicador radiofónico, Antonio García Rivilla ha puesto hoy, 19 de agosto, fin a un capítulo profesional de más de 40 años dedicados a la información deportiva y general en la emisora local de la cadena Ser, Radio Segovia.

García Rivilla (19-XI-1949) entró a trabajar en la emisora en la que ha desarrollado toda su vida profesional en 1972 y en ese tiempo ha coincidido con “infinidad de amigos”, voces también características de la radio local, como Pepe Castrillo; Consuelo Muñoz; Luis Zúñiga o Gabriel Gómez Pintos, “entre otros muchos, además de todos los que están ahora”, apuntó para atajar la que sería una larga lista.

Trabajando como redactor de información general y manteniendo esa faceta durante todo este tiempo, desde el principio se especializó en las noticias de carácter deportivo local, convirtiéndose en la voz con la que muchos segovianos han conocido en directo los éxitos de los deportistas locales. También sus fracasos y la problemática específica de cuantas disciplinas se practican en la provincia, de la que daba cumplida cuenta diaria en sus informaciones.

Con un reconocido prestigio entre los compañeros de profesión y en el mundo del deporte, el veterano periodista fue también presidente de la Asociación segoviana de la Prensa Deportiva durante más de veinte años y tras su relevo continúa como asociado activo del grupo.

Para homenajear a García Rivilla, el programa “Hoy por hoy, Segovia en directo”, que dirige Alfredo Matesanz dedicó su primera hora de hoy a recordar su periplo laboral con una “tertulia sorpresa” en la que participaron algunos representantes del mundo deportivo segoviano como Pedro Delgado, Paco Maroto, Jesús Fernández, José María Martín, Álvaro Gómez, David Matarranz o Miguel Ángel Fuentetaja.

El periodista, sorprendido por la emisión en la que se hizo protagonista, se emocionó en varios momentos del programa y explicó que ahora tratará de disfrutar de la jubilación, aunque “no perderé el contacto con este mundo”.