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Unidades de Gestión Clínica: así no

Este verano la actividad de comunicación (o de propaganda) de la Consejería de Sanidad no ha parado, a falta de poder anunciar incrementos en el presupuesto de sanidad, reducciones de listas de espera, recuperación de plantillas o inversiones en equipamiento sanitario, se ha rescatado el comodín de las Unidades de Gestión Clínica (UGC). Las reacciones contrarias han sido inmediatas.  Sanidad aprovecha las vacaciones para impulsar las unidades de gestión clínica.

El Consejero de Sanidad anunció, la puesta en marcha en los próximos meses de 15 UGC en Castilla y León (ninguna de ellas en Segovia). Mucho ha llovido desde la primera presentación de esta iniciativa, en una convocatoria a más de 300 cargos y responsables de SACYL, realizada sin reparar en gastos en el salón de actos de las Cortes de Castilla y León, en Noviembre de 2012. Enlace.

Se presentó entonces el primer borrador del Proyecto de las UGC en Castilla y León, fue apresurado y como casi siempre en nuestra sanidad más fachada que realidad (se bromeó que tantas fueron las prisas que en el primer documento se colaron varias “x” del copia/pega del borrador gallego).
Había prisa por unirse mediáticamente a la ola creciente en muchas comunidades autónomas, para utilizar la gestión clínica como fachada para los recortes que comenzaban a aplicarse en la sanidad pública. Algunas como Castilla La Mancha (Cospedal) no ocultaban sus intenciones ni en los programas (ver imagen), otras como Castilla y León se incorporaban con dudas (que parecen seguir después de 4 años) y negando su relación con los importantes recortes que se estaban comenzado a realizar y han continuado hasta el momento.

UGC CLM

La gestión clínica no es un asunto nuevo, nadie parece recordar que ya en el año 2001 el INSALUD desarrollaba las primeras iniciativas para mejorar la gestión de centros sanitarios y sus servicios clínicos. Curioso cómo se recupera a partir de 2010 la Gestión Clínica para un uso partidista de la sanidad y posteriormente para amparar los recortes.

Insalud

Un pequeño inciso informativo para los responsables del PSOE de Castilla y León, que se posicionan contra las UGC, la primera Comunidad Autónoma en desarrollarlas fue Andalucía en 2010, después de años parece que es bueno conocer resultados positivos y errores. (Andalucía es la CCAA que menos gasto por habitante dedica en sanidad). Lectura recomendada: La Servidumbre de los médicos. 

Desde la primera presentación (Noviembre 2012),  en Castilla y León hemos tenido varios borradores, alguna experiencia piloto favorecida y sin recortes, un  proyecto que debió ser rectificado por orden judicial, hasta el actual Proyecto de Unidades de Gestión Clínica (Decreto 57/2014), que sigue siendo rechazado por todos los profesionales sanitarios, sindicatos (Mesa Sectorial de Sanidad) y partidos, excepto el PP.

En la última presentación el Consejero de Sanidad se rodeó de profesionales sanitarios, que con buen criterio defendieron que si disponemos de recursos y capacidad de decisión los profesionales podemos hacerlo mucho mejor que los políticos sanitarios y su grupo de nombramientos de libre designación. Vídeo en TvCyL.

presentacion UGC
Muchos sanitarios de estas 15 UGC ahora propuestas, en voz baja reconocen que sólo esperan de este modelo que les sirva en su caso, para salir cuanto antes de las plantillas reducidas y ausencia de equipamiento, esperando poder dar mejor servicio a sus pacientes. La interdependencia de todos los servicios en la atención sanitaria y la permanencia de las estructuras de dirección, no parece que vayan a dar lugar a mucho más, aunque comunicación de su excelencia seguro que tendremos.

La pregunta es si este modelo de UGC puede ser una aportación positiva a nuestra maltrecha sanidad pública, o no es más que de nuevo una cortina de humo que no deje ver la realidad.

Muchos creen que las UGC son una tapadera de la privatización de la sanidad. La Junta inicia la privatización del hospital. 

Personalmente me parece que al menos el texto del Decreto no da para ese posible interés, porque además no sería necesario, ya se está produciendo una agresión sistemática a la sanidad pública sin necesidad de poner en marcha las UGC: recortando plantillas, no realizando inversiones en tecnología sanitaria y renovación / adquisición de equipos…  Todo ello reduce la calidad asistencial, se incrementan listas de espera, y es aquí cuando aparece la sanidad privada como complementaria y salvadora, apoyado con una labor mediática de su lobby y algunos profesionales, se está hipotecando la sanidad pública con un difícil retorno de la calidad asistencial.

varios UGC

Resulta curioso ver al Consejero de Sanidad acusando de conservadores a los que no están de acuerdo con su modelo de UGC. Se olvida que hay otras formas de gestionar la sanidad. Podía empezar por reducir la estructura de los servicios centrales y sus cargos directivos de nombramiento digital, así como en las gerencias, aumentar el presupuesto sanitario donde es necesario cerca del paciente, trabajar realmente para tener un portal de transparencia sanitario que le aporte a él y a todos los castellanoleoneses datos reales de nuestra sanidad; revisar profundamente los sistemas de información que se utilizan con los pacientes y en la gestión, explorar nuevas formas de organización coordinada y de comparación entre servicios clínicos similares (benchmarking), todo ello al amparo de criterios de calidad y eficiencia de las sociedades científicas y liderado por los profesionales, dentro de una gestión más trasversal y de responsabilidad compartida…

Debemos explorar entre todos los estamentos profesionales nuevas formas de organizarnos en sanidad, ser más trasparentes, eficientes y ofrecer a los pacientes una sanidad pública de calidad, pero no en el marco actual de recortes y politización de la sanidad pública que es lo primero a revertir. Sin esos principios, las medidas que se tomen no aportarán una mejora real, y podrán ser vistas como iniciativas bienintencionadas, cortinas de humo, incluso como nuevas agresiones al sistema sanitario público.

Si se cumple lo anterior, para comenzar un debate sano y sin desconfianzas, lo primero es descartar el nombre de “Unidades de Gestión Clínica”, el término ha sido manoseado y manipulado por todos: los políticos que lo rescataron para los recortes, los gestores que quieren usarlo como pantalla para mantener sus puestos y estructuras de poder, los lobbys de la sanidad privada, los que ven amenazados sus estatus de jefe, responsable o sindical, o los que lo usan como arma arrojadiza política.


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Nota: Este Blog expresa opiniones personales, no de ninguna administración, organización o partido político. Si alguien se siente agraviado por mis comentarios puede escribirme y corregiré todo lo que sea incierto o contenga alguna ofensa personal.

Author: Opinion

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2 Comments

  1. Medrados estamos don Javier. Demasiado ‘jefecillo digital'(en su primera acepción de la RAE). Estamos en manos de una aristocracia política de cargos por amiguismo o partidismo preocupante; en todas la áreas de la función pública. Grupos de presión privados que van al dinero fácil con gerentes titulados (en lo que sea), a veces sin ser profesionales de la materia concreta. Como bien apunta usted profesionales, en este caso sanitarios, hay. Otra cosa es el dinero y las cortapisas en favor de trepas medradores.

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  2. Muy interesante y clarito. Enhorabuena por su artículo.

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