En el marco de la restauración de la capilla del Santísimo, la Catedral de Segovia ha iniciado la segunda fase, obras que comenzaron el 1 de agosto continuando las labores de la primera fase que ya tuvieron como núcleo la capilla de los Ayala. En la primera fase, se intervino en la cubierta plana exterior de esta capilla y los trabajos se centraron en el levantamiento de la cubierta, su vaciado e instalación de una nueva estructura para permitir la ventilación perimetral.
En la segunda fase que comienza este lunes 1 de agosto, el interior de la cúpula de la Capilla de los Ayala va a ser restaurado con el objetivo de frenar los desprendimientos de algunos elementos producidos a lo largo de los últimos años. Los trabajos han comenzado con la instalación de andamios en toda la planta y, por consiguiente, este espacio permanecerá cerrado hasta el fin de las obras.
En concreto, el proceso de restauración del interior de la cúpula se iniciará con una primera actuación para eliminar los levantamientos de las cornisas, humedades y con el pegado de las zonas desprendidas. A continuación, las partes de piedra caliza del cuerpo de la Capilla de los Ayala serán restauradas y a todo el conjunto se le aplicará el mismo entontado con la utilización de pigmentos naturales. La balaustrada de madera que rodea la cúpula en su base se fijará a la estructura y se llevará a cabo un proceso de limpieza y conservación. El tiempo estimado de duración de las obras de restauración es de 45 días, plazo que se estipula para que quede finalizado con la celebración de la novena a la Virgen de la Fuencisla.
El proyecto de restauración de la Capilla de los Ayala está dirigido por el arquitecto Juan Arnuncio Pastor, que ha contado con la colaboración y el trabajo del Cabildo Catedral y de su canónigo fabriquero, José Gómez. Las obras han sido presupuestadas en 92.000€, realizadas por la empresa de restauración y conservación arquitectónica, Trycsa, y financiadas al 100% por el Cabildo.
Culto en la Capilla del Santísimo
La Capilla de los Ayala es el centro litúrgico de la Catedral de Segovia y el comienzo de las obras en su interior obliga al cierre de toda su planta, cierre que no fue necesario durante los trabajos realizados en el exterior debido a la instalación de una red en la base de la linterna.
El valioso retablo barroco de José de Churriguera va a ser cubierto para no sufrir desperfectos al igual que todo el mobiliario del interior de la Capilla. El Santísimo se va a trasladar a la Antigua Sacristía con la instalación de un altar bajo el Cristo de la Agonía, obra de Manuel de Pereira, y situado en la parte izquierda de la Capilla. Los bancos se situarán en torno a este altar improvisado de forma que puedan asistir el mayor número de personas a los servicios religiosos.
El horario de misas no se modifica y el culto en la Catedral tendrá lugar en la capilla del Cristo de la Agonía de lunes a sábado a las 10:00. Ya que ha coincidido con la época estival, los domingos y festivos la Eucaristía se celebrará en el Altar Mayor del templo a las 11:00 y 12:30.
Segundo proceso de restauración
Una vez finalizadas las obras en el interior de la Capilla de los Ayala se daría por terminada la primera intervención en el conjunto de la Capilla del Santísimo Sacramento. La segunda intervención corresponde al proyecto de restauración de la cubierta de teja a dos aguas de la Antigua Sacristía o Capilla del Cristo de la Agonía, con una superficie total de 422,5 m2. Las obras están pendientes de aprobación y de completar los permisos y licencias procedentes, pero está previsto que empiecen en febrero del próximo año.
La Capilla del Santísimo Sacramento está estructurada en dos zonas bien diferencias y separadas por siglos y estilos arquitectónicos.
La primera parte, y más antigua, es la Antigua Sacristía o Capilla del Cristo de la Agonía, ejecutada en 1562 por Rodrigo Gil de Hontañón y rematada con bóveda de crucería. En su interior destaca el Cristo de la Agonía, obra del escultor Manuel de Pereira –S. XVII-, que fue donado por la familia del Marqués de Lozoya. En frente se alza el retablo barroco del siglo XVII, trasladado de la antigua Iglesia de San Nicolás y que alberga varios cuadros del santoral.
Una vez traspasadas las tres rejas forjadas por Martín de Ciorraga, comienza la Capilla del Santísimo Sacramento o Capilla de los Ayala. De planta cuadrada, está coronada con cúpula de media naranja sobre pechinas y fue encargada por Antonio de Ayala y Berganza al Cabildo en 1684. Dirigida por Juan de Ferreras y terminada por Juan de Setién Güemes, la cúpula y la linterna de coronación fueron ejecutadas por Merino de Cáceres. El retablo barroco, obra de José de Churriguera, destaca en este conjunto gracias al rico decorado de sus columnas salomónicas y a las reliquias que alberga.
Esta Capilla del Santísimo ha sufrido cambios debido a problemas en su estructura, en concreto, causados por el terremoto de Lisboa del año 1755, que provocó graves daños en el conjunto de la cúpula de media naranja. El resultado fue un peligro de desplome lo que obligó a construir y redoblar el contrafuerte de piedra alrededor del cuerpo.
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