Posted By Justo Verdugo on 23, Ene, 2018

Si, ya lo sé. Soy un morboso. Voy por ahí leyendo de mi móvil en público el listado de acusados y beneficiarios a título lucrativo del caso de las jubilaciones de Caja Segovia pero sólo por el mero placer de observar las reacciones del personal, que el asunto ha causado un importante terremoto en esta sociedad de provincias que es la nuestra. (No ponga cara de enfadado que cosmopolitas, cosmopolitas, no somos).

Directivos de la Caja durante un curso de formación.

Mire que el asunto que se juzga, por achacarse delitos penales, —administración desleal y apropiación indebida— es grave y a pesar de eso, pues la gente va y sonríe cuando dices los nombres. Es una sonrisa que se me antoja malévola, como de ajuste de cuentas o más bien de esas de “te estaba esperando”. Caramba, y eso sin empezar el juicio. Hombre, debo decirle que pasa más con unos, que con otros. La sonrisa es más espontánea para nombres conocidos que lo fueron todo por sus cargos o de directivos que hasta ayer andaban por el mundo mirando al personal por encima del hombro y hoy ya han cambiado hasta sus rutinas de paseo por calles principales y ni siquiera pasman en las redes sociales.

Por cierto, me salen al menos tres acusados cuya salud no está en su momento más boyante. Quizá retrase los trámites y el tiempo extra logre que los consejeros que no declararon durante la investigación, yo qué sé, por estar aforados u otras razones, y que parece que irán obligados a prestar declaración durante el juicio puedan atemperar los nervios que me han dicho que los teléfonos ardían este fin de semana que todo asesoramiento es poco…

Ciudadanos agolpados tras las vallas en la zona de rodaje de Masterchef.

Pero yo hoy iba de sonrisas, que las hemos visto a montones estos días en los que andaba por aquí la tele haciendo programas. Había uno de seguridad vial por las calles sin mas alharacas que las de un equipo de ocho personas haciendo su trabajo más solos que la una y estaba el de Masterchef por el que se ocupó el Azoguejo y Santa Columba durante dos días y se trajo un equipo de 50 personas además de las estrellas del programa y los concursantes… Todos gratis, que al programa se le regaló hasta la harina. Dicen las administraciones implicadas que la promoción de Segovia que se recibirá a cambio compensa todo y yo me pregunto si no será demasiado caro, que a los cocineros también les interesa un fondo de escenario como el Acueducto…

El delegado y los jefes de servicio de la Junta en Segovia.

Será que no se mucho. Fíjese que no entiendo muy bien que el delegado territorial de la Junta, Javier López Escobar, se siente delante de los periodistas escoltado por “sus” jefes de servicio para contar que la gestión de la Junta en Segovia en 2017 no es que sea buena, es que es “excelente”, por ejemplo en el tratamiento del agua o en la calidad del hospital, que lo pone en un ranking… Y mire que he repasado si la noticia era de otra provincia pero no, hablaba de esta.

No debía acordarse el delegado en ese momento del cacao que hay montado en la dirección provincial de Educación a cuenta de la plaza del Jefe de Inspectores donde hemos sabido que aunque la Ley obliga a que se cubra por alguien que tenga superada la correspondiente oposición, aquí llevamos años cubriéndola con personal que nunca superó el examen, “que no es lo que dice la Ley pero aquí ha funcionado así” dicen muy serios desde la delegación educativa donde curiosamente la palabra dimisión no se pronuncia en ningún despacho y eso que ya hay nueva inspectora con su oposición y todo, enviada desde Valladolid para deshacer el nombramiento que se hizo (y defendió a capa y espada) hace sólo un mes… No se retire del aparato que me dicen que los bandos están cada vez más marcados en las oficinas de José Zorrilla. Ya le cuento un día de estos con detalle.

Fachada del Ayuntamiento de Segovia.

Muy serios se ponen los concejales de la capital cuando se les mencionan los presupuestos del año que viene de los que la oposición no tiene aún ninguna información oficial y está que se sube por las paredes. Sorprendía esta semana que hasta C’s se quejara de la falta de información y eso que fuentes muy buenas, muy buenas me aseguran que se les ha visto reunidos con Alfonso Reguera y otros del Gobierno local en los últimos meses y en sede municipal. Atentos a la postura final de cada uno que al Gobierno le hace falta un concejal que se abstenga, por lo menos.

Ya lo ve. Aquí los tribunales sólo nos sirven para pufos, que lo que es la delincuencia ordinaria parece que la llevamos bajo control, que lo dice la Policía Nacional en su fiesta anual en la que, oiga, la mayoría de los delitos denunciados va a la baja, como pasa desde hace años. Pues nada, enhorabuena y a seguir la racha y ya si se informara bien de las actuaciones policiales, esto sería Jauja. Para nota la comunicación de un rescate de la Guardia Civil en Navafría que ocurrió, dicen, “hace unos días”. Pero hombre, que hay periodistas en paro que seguro que…

Bueno, pues ya que estoy acabo con cifras: el Museo Esteban Vicente recibió en un año 14.000 visitantes, escolares en grupo incluidos. La Catedral, 412.740. A pensar.

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