La muerte tiene precio y, desde ahora, catálogo de posibilidades

Posted By Editor on 31, Jul, 2017

Panel de nichos para cenizas, en San Miguel.

Los tiempos avanzan una barbaridad y cada día la vida nos da muestras de ello. Tras mes y medio de obras para montar un armazón de madera con metacrilato iluminado con luces led en la capilla de La Milagrosa, en la iglesia de San Miguel, en plena Plaza Mayor de Segovia, cuenta con 138 columbarios con capacidad para dos urnas con cenizas, provenientes de incineraciones. La Capilla elegida está situada a la derecha de la nave central del templo, tal y como entramos en él.

El Sacerdote de esta parroquia, Rafael de Arcos. Recuerda que desde 2016, cuando el Papa Francisco redacta un documento sobre la custodia de las cenizas que provienen de las incineraciones, permitidas por la Iglesia Católica desde 1963, cuando el Concilio Vaticano II así lo indicó, en tiempos del Papa Pablo VI; La Iglesia debe procurar espacios adecuados para depositar estas cenizas.

Podrán acceder a estos columbarios todos aquellos Católicos que así lo deseen, pues no es necesario pertenecer a esta parroquia, por un espacio de tiempo de 75 años, ampliable (si así se desea) en otros 50 años, con un coste de 1750 euros por urna, precio que al final es igual al del cementerio municipal gestionado y en cada columbario hay espacio para dos de ellas.

Para alcanzar esta situación, la parroquia ha debido seguir un proceso complejo y poner en conocimiento y debate los hechos ante el Consejo de Gobierno de la Diócesis, después ante el Consejo de Economía y, por último, ante el Consejo de Unidad Pastoral Centro, de la propia parroquia.

El asunto no ha dejado indiferente a nadie pero mucho menos a las veinte personas, aproximadamente, que ya se están informando por los pormenores de este nuevo “servicio” que ofrece la parroquia que, además incluiría una misa mensual durante todo el tiempo que las cenizas permanezcan en el interior la iglesia (hasta 125 años) y que permite “adquirir el derecho” sobre el columbario con todo tipo de facilidades económicas o, lo que es lo mismo, abonar el coste de este derecho por urna (1750 euros) con facilidades desde el momento en el que se desee y sin esperar a que se produzca el fallecimiento.

El Padre Rafael de Arcos, comentaba, además que, por ahora, no tiene noticias de que alguna otra parroquia esté iniciando el proceso que ya está en marcha en San Miguel.

La muerte siempre ha tenido un precio pero ahora, también tiene catálogo de posibilidades.