Posted By Redacción on 23, Feb, 2018

Sabido es que San Bartolomé exhorcizó a una princesa india. El santo hizo salir al demonio que poseía el cuerpo de la doncella y encadenó al maligno para los restos. Ahora bien, es fama que cada 23 de agosto el santo libera al diablo por unas horas. Al menos en Sepúlveda, que ese día encomienda a tres mozos recorrer las calles del pueblo disfrazados de demonios para amedrentar al vecindario.

Es la fiesta del Diablillo de Sepúlveda, que el pleno de la Diputación de Segovia elevó el 22 de febrero a Manifestación de interes cultural provincial. Sepúlveda se suma así a los Cirios de Santa María y a la Octava de Fuentepelayo, como festejos de especial interés.

Otro punto remarcable fue el relativo a acomodar la mecánica administrativa de la Diputación a la nueva ley de contratos. Entre otros aspectos, la nueva ley, que entra en vigor en marzo, obliga a las mesas de contratación a minimizar la representación política así como a evitar que en las mesas estén los técnicos que elaboran el pliego de condiciones. A su vez, este cambio obligaba a recomponer la mesa de contratación de la Diputación, que en adelante estará formada por cada diputado delegado del área que corresponda, más el interventor, la secretaria, la jefa de contratación, además de los responsables de tesorería y contabilidad.

No es un tema menor por cuanto la nueva ley establece, además, cambios en la manera de contratar. Así, las compras de consumibles no podrán superar los 15.000€ para adjudicaciones directas sin concurso. Además, si se contrata 15.000€ a un proveedor, no se le puede volver a contratar por una partida asimilable. En lo tocante a obras, el techo se eleva a 40.000€. Cambios de complejo acomodo en municipios pequeños y sin apenas cuerpo administrativo. El tema dará que hablar.

Mociones

Despachado el pleno se entró en el apartado de mociones con el siguiente resultado. Dos mociones institucionales, consensuadas por los cuatro portavoces. Una relativa a la celebración del Día Internacional de la Mujer, la otra relativa a no prorrogar las concesiones sobre las autopistas segovianas.

También unanimidad en la moción de la No Adscrita, María Cuesta, para exhortar a los medios madrileños a dejar de usar de una maldita vez el término “Sierra de Madrid”. Tema tópico donde los haya.

No hubo suerte para el PSOE. La mayoría popular impuso enmiendas transaccionales a las dos mociones, una relativa a la contratación de empleados temporales en los municipios de menos de 5.000 habitantes, la otra demandando un reglamento regulador de las condiciones de cesión del teatro Juan Bravo.

Plan de Empleo

El debate más interesante fue el del PREPLAN, el Plan de Empleo Local, por el que la Diputación, con fondos de la Junta, facilita la contratación temporal de operarios polivalentes en los municipios pequeños. Pedía Alberto Serna, portavoz del PSOE, aumentar los 2.500€ de subvención autonómica, habida cuenta que, a poco, contratar a un operario para que en verano el pueblo luzca cuesta unos 10.000€. Además, el personal contratado debe proceder de colectivos en grave riesgo de exclusión, parados que no perciben prestaciones ni otras ayudas. En la práctica, condiciones restrictivas para Serna que hacen que, cada año, un centenar de municipios no puedan acogerse al plan.

Le dio réplica el responsable de Promoción Económica, Jaime Pérez, que afeó a Serna sesgar los datos. “En 2017 optaron a la ayuda 147 municipios, de los que 130 finalmente entraron en el programa. De estos, solo 2 ayuntamientos recibieron el mínimo de 2.500€, en tanto 98 percibieron 4.000€ de subvención”. Serna salió del brete como pudo señalando que si se suman municipios y pedanías ya no son 207 pueblos, sino 247. Negoció una enmienda, un compromiso para aumentar la dotación mínima en 2018, a lo que Pérez se cerró. “Si llega a depender de mí,  ya sabe que le acepto el órdago”, sentenció el presidente de la Diputación, Francisco Vázquez.

Un grupo de estudiantes de Derecho de la UVa, de público en el pleno.

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