Tras la celebración de la sesión ordinaria de pleno, la pasada semana, y la celebrada para que el Defensor del Ciudadano diera cuenta de su informe anual y con todo un mes por delante sin sesiones programadas, el departamento de Gobierno Interior del Ayuntamiento está aprovechando estos días para realizar trabajos de mantenimiento.
Nada complicado: algunas grietas en la escayola de las paredes, cambio y recolocación de los focos y limpieza de techos y cristales, normalmente de acceso imposible, que el salón supera los seis metros en los puntos más altos, lo que ha obligado a instalar todo un entramado de andamios además de protecciones plásticas y de tela para paredes, mobiliario fijo y suelos que cambian radicalmente la fisonomía de tan solemne sala, ahora menos, que también se ha descolgado el retrato del Rey de la pared principal, mientras los escaños, en dos filas, dan aspecto de vagón de tren a la antesala del hemiciclo.
Los trabajos serán breves y en la Alcaldía tienen claro que la sala estará lista y reluciente a finales de mes, cuando vuelva a reunirse la Corporación.
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