Posted By Redacción on 12, Sep, 2016

Si mientras lee este texto ve que la cosa se entrecorta, la red se cae o hay espacios en blanco, hágame caso: deje de piratear la red del Ayuntamiento y contrate una propia. ¿Qué quiere? Me llama la atención que un ayuntamiento volcado en lo tecnológico me cuente que la empresa a la que ha contratado hace un rato —por medio millón si se cumple la “permanencia” de tres más un año que viene en el contrato— para que atienda todas sus comunicaciones digitales va y falla en la prestación del servicio… No sé. Es como si el adjudicatario de la limpieza viaria se destapa diciendo que no tiene contenedores para todas las calles, o algo así.

Parece que Vodafone cumple a pies juntillas con las obligaciones del pliego y que Contratación vio correcta su propuesta y eso me preocupa aún más, la verdad. Como me tiene en ascuas pensar que polis y bomberos se quedan en blanco o hablando solos en ocasiones… ¿A usted no? Mire que en semanitas como las que hemos tenido…

Mientras, en la Guardia Civil hemos conocido al nuevo jefe de la comandancia, el teniente coronel José Luis Ramírez, que aparecía en las fotos oficilaes junto a la subdelegada, Pilar Sanz. En Facebook vi una entretenida conversación que partía de la idea de una mujer que pensaba que ambos eran matrimonio y se deshacía en elogios hacia “la mujer del guardia” hasta que otros comentarios la sacaron del error… Al final todo quedó aclarado y cada oveja, con su pareja. Como debe ser.

Me estoy liando y me olvido de la noticia bomba de la semana, la dimisión de la vicepresidenta de la Junta, Rosa Valdeón, pillada por el alcoholímetro en ruta entre Madrid y Zamora, que viene a ser, dado el carácter y la rectitud de la afectada, como si a Torquemada le pillan haciendo brujería. La inesperada baja abre crisis en el Gobierno y quizá en el partido en la región y el personal anda ya recolocándose… Ya le cuento que a mi estas cosas me pirran. (Así tengo la cabeza, ya ve).

A mi Segovia, que esta ciudad es cada vez más internacional, en parte gracias al alumnado del IE University, con casi 500 alumnos extranjeros nuevecitos, ya sumidos en el nuevo curso inaugurado esta semana. Por cierto, en mis tiempos, la Universidad era lo último en empezar el curso. ¡Qué tiempos, qué costumbres!

Estaba yo con los extranjeros, que son el grueso de los visitantes que tenemos y cuya cifra sigue batiendo récord, también en la Catedral, donde cada vez hay más gente que paga la “entrada-donativo” —me encanta el término— para ver la Seo o para subirse al campanario. Dicen que donde las bolas, en días claros, se ve Salamanca ¿Será cierto?

El otro monumento de referencia es el Alcázar, ya sabe, parte de la Academia de Artillería. Menciono el detalle porque seguro que recuerda cuando les quitaron la bandera del Acueducto y si mira a la Torre de Juan II se dará cuenta de que han sacado todo el trapo que tenían en el almacén. ¿Será una venganza o sólo una filigrana estética de algún responsable de la fortaleza?

Hablando de banderas, la multicolorida del colectivo gay seguirá formando parte del logo de Segoentiende, la organización segoviana que ha visto peligrar hasta su nombre en una lucha de patentes y registros con un particular —digo yo que algo rancio será— descontento con que ese nombre se vincule a la organización. Gana el colectivo. Me gusta cómo ha quedado resuelto este asunto.

No voy a hacer hoy referencia a todas las celebraciones taurinas desatadas por nuestros pueblos en fiestas que me como el espacio, aunque sí haré reseña de los tropecientos homenajes que se están celebrando en honor del matador fallecido, Víctor Barrio, que probablemente hasta son pocos, pero todos los días… Se le recordó también en la fiesta anual de los camareros por Santa Marta, que era socio del gremio que mire, es uno de esos colectivos que actúa como tal. Y mire que son un montón de profesionales. Enhorabuena.

Bueno, le dejo que los jueces andan desperezándose después del parón veraniego —los tribunales, como las oficinas de antes: en agosto, ni un papel— y digo yo que los casos pendientes de Caja Segovia van a dar titulares, que ya sabe que están en ese momento de “cerramos y nos olvidamos de todo” o “seguimos y verás la que liamos”.

A ver, que este es el típico caso en el que me apuesto un euro con usted sobre el resultado final y no lo pierdo pero mejor esperamos a ver qué pasa ¿No?

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