Rubén Arnanz, jefe de cocina de Restaurante Villena, se enfrentó ayer al reto de cocinar a 500 metros de altura y en la barquilla de un globo. La bella imagen, con trasfondo de Segovia, es el resultado de la colaboración de Arnanz con la empresa de viajes en globo Siempre en las Nubes, aunando esfuerzos para difundir una original propuesta: comidas en globo para sibaritas.
Y es que el inquieto Arnanz, que al frente del equipo del Villena consiguió una estrella Michelín el pasado noviembre, ha confeccionado un menú con productos locales con la idea de reforzar el atractivo de los viajes en globo sirviendo un menú de “la más alta” cocina en plena singladura y que el propio Rubén prepara a quinientos metros de altura y con vistas al Guadarrama y a los techos de Segovia.
El menú de a bordo para el mes de enero se compone de tomate encurtido en septiembre con matices de tomillo, salmón curado con anisados, morcilla de matanza y nabo acidulado, puerro del Carracillo asado y caviar de trucha, presa ibérica aliñada, bombón de pichón a la llama, pato curado pan crocante, lías de tempranillo en caviar especiado y calabaza mágica. Al aterrizar, copa de cava y entrega de cesta de productos locales.
20 enero, 2016
Ya no saben que inventar para sacarnos el dinero, despues de los platos enormes con infimas cantidades de dinero toca buscar sitios extraños donde poderte cobrar mas y al final ni te enteras del globo ni de las vistas.
Si alguien tiene hambre mientras admira Segovia desde el cielo, con un buen bocata de jamón creo que puede ser suficiente.